Una vez más, la Selección Colombia Sub-17 se despidió de un sueño al perder una final del Sudamericano, que tenía prácticamente en la bolsa hasta el minuto 87. El equipo colombiano, que había mostrado un gran rendimiento durante el torneo, se dejó empatar 1×1 en los últimos instantes del partido y terminó cayendo 1×4 en la tanda de penales.
Colombia parecía encaminarse hacia la victoria, pero una falta de concentración en los minutos finales permitió que el rival igualara el marcador. A pesar de los esfuerzos de los jóvenes guerreros, la presión de los penales resultó demasiado y, lamentablemente, no lograron concretar su hazaña.
El equipo, que había dejado una huella significativa en el torneo y había emocionado a los aficionados con su juego, ahora se enfrenta a la decepción. “Gracias Guerreros” resuena entre los hinchas, quienes reconocen el esfuerzo y dedicación de estos jóvenes futbolistas.
De una hazaña a un final frío, los chicos del Sub-17 aprenderán de esta experiencia para seguir creciendo y luchar por nuevas oportunidades en el futuro.